No sé por qué, pero hablamos y te doy explicaciones. “Prometo que no me quiero llevar a nadie por delante... es simplemente que tampoco quiero llevarme a nadie conmigo.”
Pero tú no me escuchas. Sólo insistes y sigues correteando, aunque yo no.
Ahora no quiero jugar... porque sé que no eres tú con quien querría jugar para siempre...
Pero tú no me escuchas. Sólo insistes y sigues correteando, aunque yo no.
Ahora no quiero jugar... porque sé que no eres tú con quien querría jugar para siempre...